La tecnología avanza muy rápido, por lo que dentro de unos años, cuando tengamos que educar en la escuela nos encontraremos con algunos cambios respecto a lo que hemos estudiado. Respecto a los alumnos, es muy importante que no pierdan interés por la enseñanza con las TICS ya que si se habitúan a hacer un uso inadecuado de estas no verían el ordenador como un instrumento de estudio, sino como un pasatiempo, una herramienta que está compuesta de juegos y medios por donde pueden interactuar unos con otros. No estoy diciendo que esto sea negativo para ellos, pero debe verse como algo secundario. Ser maestro no es fácil, ya que muchas veces nos planteamos si hay que dejar un margen con el alumno o nos debemos implicar más con ellos, ¿cuál es o debe ser el límite de esta implicación? Ser docente se debe atribuir a comprometerse con el alumnado, ya que si elegimos estudiar esta carrera, es porque nos entusiasman tanto los niños, como su desarrollo. Sin embargo, no podemos estar las 24 horas con cada niño para ver si hacen un uso adecuado de las TICS, ¿debemos aprovechar todo el tiempo que tengamos con ellos para complementar las horas que no pasan en clase? ¿Es eso posible? Poniendo ganas, fuerza y entusiasmo, todo lo es.
Adaya Pérez Gallardo
2º Primaria E
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